jueves, 31 de diciembre de 2009

Cerrando ciclos del 2009

Hay mucho que contar. Aunque no acostumbro a recopilar las cosas conseguidas, y mucho menos publicarlas, creo que esta ocasión debo hacer este esfuerzo mayor, para agradecer un año que trajo más buenas cosas de las que esperaba.

Empiezo mencionando un ciclo de 5 años: mi carrera de Arquitectura, que este año culminó por la puerta grande, y esto debo agradecerlo a todos aquellos que me acompañaron creyendo en mí hasta en los momentos donde yo misma no creía en lo que estaba haciendo durante este trayecto arduo y difícil de amanecidas, lloraderas, trabajo sin descanso… pero también mucho aprendizaje, diversión, inventos y exploraciones. Lo mejor de esta experiencia es que me quedan amigos inseparables, que aún terminando este ciclo sé que seguirán caminando conmigo pendientes de los ciclos y cosas que apenas empiezan a abrirse.
Una experiencia para contar que dejó mi carrera fue presentar mi tesis y su proceso de realización. Mi tesis “Imagen y Ciclo, planificación para un contexto natural” se centró en la realización del ordenamiento de uso para el Parque Nacional Los Haitises, definir las actividades y rutas que podían diseñarse para este tipo de territorio y el nivel y escala de intervención arquitectónica que este podría alojar dadas las condiciones de biodiversidad y paisaje de este particular territorio.

Con esta tesis conocí casi toda la formación del Carso  Los Haitises, pude conectar intereses y pasiones muy personales con mi carrera a través de una causa individual, que luego se convirtió en una causa colectiva y de lucha en contra de la cementera, una prueba de que la juventud en nuestro país aún tiene voz y puede alzarse en la lucha y organización de grupos en defensa de lo que piensa y apoya.

Otra de las cosas que marcaron este año fue ser premiada por la UNESCO, Unión Latina y el Centro León dentro del concurso “Conoce y Evalúa tu Patrimonio Inmaterial” un concurso dirigido a jóvenes universitarios, donde gané con el ensayo “La Obra Rupestre, patrimonio salvable integrado al conglomerado urbano” donde explicaba ideas sobre cómo el patrimonio de rupestre que se encuentra en las cuevas de la ciudad de Santo Domingo podía ser aprovechado y conservado tratando de integrar estos espacios al resto de la ciudad.

Agradezco mucho a estas instituciones el haber tomado en cuenta una simple idea, valorarla y premiarla con su publicación en París junto a los demás ensayos ganadores de los países latinoamericanos participantes. Este acontecimiento abrió las puertas de varios proyectos cheverísimos que vienen para el año 2010, con el patrimonio cultural intangible de nuestro país.

Salir el último año de mi universidad entre los estudiantes destacados y reconocidos por la institución, por tercera y última vez me llenó de alegría. Es un honor para mí que PUCMM reconozca los trabajos extracurriculares que hacemos los estudiantes, que nos motiven a abrir puertas no sólo en el recinto universitario, pero también en el interesante mundo por el que estamos rodeados.

Involucrarme profesionalmente con un grupo espléndido como es el grupo de arquitectos con el que trabajo fue otra de las mejores cosas del 2009. Gente joven, extremadamente inteligente, despierta, dispuesta a dar y enseñar montones de cosas para que los años que estamos dedicando a servir a nuestro país sean de provecho y buenos resultados. Gente de espíritu inquieto, buena voluntad y sobre todo sentimientos desinteresados, amigos con el que el difícil mundo laboral se hace mas fácil y seguro, a todos les he tomado un cariño irremplazable.








Este año sirvió principalmente para agregarle un punto de constancia a todas esas pasiones perdidas que recién empecé a recuperar en el año 2007. Este año esas pasiones crecieron considerablemente integrándolas de lleno a mi carrera. Mi interés por la naturaleza, la conservación ambiental, los mapas, la cartografía, la geografía, la geología, la fotografía, la cultura y la antropología… todas pasiones que llevo desde pequeñísima cuando aún no me daba cuenta del rol que tenían desde temprano en mi vida.

Finalmente, y sin restarle importancia creo que abrir este blog, junto con otras cosas y personas que llegaron también en el último mes de este año, han sido experiencias tan pero tan agradables que por poquito y hacen que se me olvide todo lo que viví en este año. Tener un espacio donde puedo reciclar esos recuerdos y escritos que se mantuvieron mucho tiempo en privado y luego encerrados en gavetas, y además concebir cosas nuevas, escritos, fotos, amistades… me estoy dando cuenta que la vida no tiene precio y una de las mejores cosas que podemos hacer es compartirlas.

martes, 29 de diciembre de 2009

Encontré a Van Gogh en Playa Bonita...





Me encanta vivir la experiencia de conocer texturas, observarlas y muchas veces... llegar más lejos que simplemente fotografiarlas. No sé ustedes, pero tal vez es que mi imaginación resulta lo absurda o ridículamente fértil como para conseguir que, al ver la textura del tronco que les dejo hoy, el cerebro salga a viajar y termine metiéndose en una de mis obras de arte favorita: "La noche estrellada" del holandés Vincent Van Gogh. 







Si este gigante post-impresionista (cuya obra empezó a valorarse luego de su muerte) se hubiese dedicado a la escultura probablemente nunca terminaría consiguiendo una obra que se asemejara a su pintura como la naturaleza lo hace con este tronco. Parece como si el artista hubiese decidido tallarlo para conseguir una noche estrellada  en versión tridimensional, pues la suavidad de las curvas es idéntica a las formas arremolinadas del cielo nocturno y estrellado de la Provence que pintó durante sus años de reclusión en el sanatorio de Saint Remy


Conseguí este tronco en Playa Bonita, península de Samaná, donde vive papa Dios... pero para eso aprovecho para hablarles en otro post.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Mi mujer




Mi mujer es, por momentos, como la “Bebedora de Ajenjo”. Sus pensamientos la pueden abstraer y llevarla hasta los rincones más oscuros de su introspección, y como si se tratase del estado de embriaguez de la dama pintada por Degas, se adormece, se aisla y se margina del resto del universo que inicialmente concibió cada una de las ideas que ahora habitan en su cabeza. El mundo se detiene y muere, para ella solo existe lo que en ese momento teje su mente.



Y si esto te parece poco atractivo o tal vez irritante, te diré entonces que mi mujer, por momentos, es como “Olympia”, y se muestra galante porque sabe que posee las cartas que necesita jugar para ganar las batallas. Pierde su inocencia y se muestra atrevida, provocadora y estimulante para la multitud, y a la vez íntima sólo para mí, como una Venus del siglo XXI .





Mi mujer besa como lo imaginó Klimt, y en medio de su total entrega usa sus dulces y suaves labios, para tocar como algodón de azúcar o regalar algún beso cianótico, de esos que quedarían imborrables de la memoria de sus víctimas. Mientras, abraza como una vez lo hicieron con Schiele, con arrebatada pasión, constrictora como el efusivo encuentro de amor mitólogico entre dioses y mortales.





Por sus besos cianóticos, te darás cuenta también que ella es fuerte como “El Grito” de Munch. Tan fuerte, que en el momento de más profunda angustia o desesperación, consigue al gritar llevarse los tormentos decidiendo el camino que tomará para llegar al final, y ganarse el mundo en el intento.



Y si además de lo que te he descrito puedo agregar algo más sobre mi mujer, diría que todo lo que puede ser, lo es apasionada al máximo. Descubrirla cada día es como se siente en los ojos y el alma el “Sol Naciente” de Monet: como neblina misteriosa acompañada de un golpe de brisa refrescante en la cara, mientras que el astro rey anuncia que nos espera para calentar el resto de la travesía.









Obras en su orden de aparición:
  1. La bebedora de Ajenjo-Edgar Degas
  2. Olympia-Edouard Manet
  3. El beso-Gustav Klimt
  4. El abrazo-Egon Schiele
  5. El grito-Edvard Munch
  6. Sol Naciente-Claude Monet

viernes, 25 de diciembre de 2009

Llegó el tercer OjO




A expandir los conocimientos y experiencias básicas que empecé hace unos años sobre fotografía, interrumpidos por un tiempo que me ha sabido a eternidad, porque esto nunca ha dejado de apasionarme. Al fin, tengo mi Canon t1, regalo de Navidad de mí para mí.


Ahora si!!!! A estudiar y punchar.

martes, 15 de diciembre de 2009

La lista


Tal vez la saqué un poco tarde, pero es que hasta que no sintiera esa brisita de Navidad que se ha dado el lujo de este año dejarnos ansiosos y en espera no podía terminar de redactar mi lista de regalos.
Si el Niño Jesús (que entre nosotros no creo que siga siendo tan niño) o Santa por falta de tiempo no pueden complacer mis antojos, pues que le pasen la lista a los Tres Reyes, ellos son más y con más tiempo, y total, siempre los preferí a ellos.



  1. Una cámara fotográfica digital
  2. Volar chichigua con vista al mar
  3. Retomar el hábito perdido de lectura
  4. Un día de picnic y paseo por el Botánico
  5. Conocer un país de América del Sur
  6. Un ejemplar de colección de “El Principito” (Santa, me lo traes en francés y te juro que aprendo el idioma)
  7. Un paseo en parapente por las montañas de Barahona
  8. Aprender (finalmente) a bailar tango
  9. 48 safaris fotográficos
  10. Un idioma nuevo (para hacerle cosquillas al cerebro)
  11. Una colaboración con el TNC y otra con la UNESCO
  12. Un viaje a la península de Kamchatka
  13. Dormir en el hotel de sal del Salar de Uyuni




domingo, 13 de diciembre de 2009

Despedida al alma que se le acaban los días


Déjame llorar en tu regazo, lugar donde nos recogemos y pido con la esperanza de que justo cuando no sea necesario contar más los días todo empezará a ser mejor. Que cuando el tiempo no exista, pueda llegar al refugio aquel donde no hay dudas, preguntas acompañadas de respuestas con mal sabor ni preguntas aún sin respuesta, donde nos domina un poder ajeno que nos mueve al antojo de las manecillas de su reloj.

¿Acaso alguna vez, antes de que termine mi tiempo, podría ver todo al revés, y quien merezca recibirá aquí y no después? Quien no desiste en su búsqueda, algún día vencerá.

domingo, 6 de diciembre de 2009

Andullo (o Sandullo?) y Triculí



Estoy aprendiendo a apreciar la magia que ocurre cuando hacemos el camino para cumplir algo, lograr un objetivo, alcanzar una meta. En los últimos meses he comprendido que al final de todo nos llevaremos los recuerdos del recorrido, en lugar del objeto perseguido.


Con un compromiso específico y voluntario, salimos Anadel y yo, acompañadas de Agustín por todo un día “road trip”. Partimos a las 7 am lamentando yo salir a una hora como aquella, a tan lejano lugar, privándonos además de aprovechar la luz del amanecer para tomar alguna foto o simplemente admirar el evento matutino.


Después del cruce de Neiba y Barahona, tuvimos que preguntar cada vez que cruzábamos por el camino de algún individuo (lo que a medida que avanzamos se volvía menos común) “cómo se llega a Roma”, para llegar finalmente a nuestro destino, Las Clavellinas, luego de encontrarnos con un sábado de Mercado agitadísimo en Neiba y ver las primeras señales del lago.


Finalmente, el reencuentro (o en mi caso el encuentro) con la “antigua familia”. Si en resumidas cuentas estábamos supuestas a hacerles un regalo a ellos (o al menos eso pensábamos nosotras), este viaje nos dejó uno de los mejores regalos, o recuerdos: un paseo a pie desde Clavellinas hasta el lago (lo cual era muy difícil de realizar antes de que el lago creciera al nivel que lo ha hecho en este ultimo año) bajando hasta aquellos 40m por debajo del nivel del mar entre pedregales, internándonos en un platanal lleno de luces donde pudimos escuchar el cantar de los cuervos y llegar a las orillas del lago, descubrir lo divertido que es jugar con las pelusas de las cattail y subir en los troncos de los árboles que la masa de agua se ha encargado de secar.


…y olvidados de que hay una vida que complicamos cada día mas, subí a Clavellinas sudada y con pelusas hasta en la lengua…


Allí nos aju'tamos tremenda jartura de moro de guandules, cerdo guisado, berenjenas y arepitas de yuca. Salimos a terminar de dar la vuelta (esta vez en vehículo) a un lago que ahora nos regala un paisaje interesantísimo, a pesar de los malos ratos que ha provocado a la gente que no pensaba que tal acontecimeinto ocurriría. Nos dimos un baño en la azufrada de La Zurza y para concluir nuestras paradas pudimos escuchar el sonido del fuete de los Cachúas en Cabral y cerramos con un atardecer que ni pienso describir por miedo fracasar en el intento, sobre las montañas que surca el río Yaque.


Espero que al final de todo cargue con tantos recuerdos de los recorridos que elija en la vida que no me quede espacios para llevar alguna otra cosa. Que si algún dia tenga que pagar peaje por ellos, no quepa el monto en mis bolsillos.


Con tantos recuerdos que construí en esta ocasión he olvidado mencionar cuál era el objetivo de este viaje. Ya no me molestaré en perder ese tiempo.

JuegOs Sin FrontEras


Hoy carezco de ganas para introducirme o describirme al lector que premeditadamente o por pura casualidad llegue a pasar por aquí. Tal vez lo haga algún día o simplemente deje que las publicaciones de este blog redacten la justa descripción de lo que soy, en cada uno de mis 40 personajes... bueno, ya, lo confieso, esa es la realidad: no me describo para no ser injusta y ofender a alguno de todos esos personajes por omitirle o haber olvidado alguna de sus más arraigadas particularidades.

Abro este espacio para aquellos que son parte de mi rutina diaria, para aquellos que me inspiran de día o de noche (o de día y de noche), y para aquellos que dejaron en algún momento de ser parte de la ya mencionada rutina, sepan que están en la rutina de mi corazón. Especialmente abro este espacio para aquellos que son curiosos y lleguen hasta aquí por mera exploración.

Y me permito finalmente, citar a un amigo que hablaba respecto a los resultados que se podían obtener de este experimento, y con sus palabras les doy la bienvenida a mi “laboratorio del alma, o laBatorio, o por qué no… babatorio”.