viernes, 15 de octubre de 2010

Color de hormiga !



Siempre pienso que Dios posee formas interesantes para devolverme a la realidad. Prueba de ello, sucede la mayoría de las veces  que me sumerjo en historias dentro de mi cabeza, y en medio de una conversación entre mi cerebro y yo, totalmente imaginaria y absurda, una paloma se estrella sobre el cristal de mi ventana (cabe la posibilidad de que la paloma también estuviese haciendo conversaciones en su cabeza) por ejemplo.

...pero en esta ocasión papa Dios botó la bola ...

Recién salía de la visita a la Trienal Internacional del Caribe, esperando que llegasen a recogerme me siento en la entrada a observar, absorta, las hormigas "caribes" gigantes que rodeaban la fachada frontal del MAM y que a mi llegada ya me habían cautivado y hasta erizado la piel. En ese instante, me encierro en mi burbuja y pienso sobre qué harían con las hormigas caribes luego de desmontar la exhibicion: -deberían dejarme llevar una a casa- dije. 

Mientras imaginaba que andaba con mi hormiga gigante debajo del brazo y que sus patas me cosquilleaban mientras paseaba con ella, recibí el punzón; ese punzón escalofriante que cada vez que sucede me recuerda que soy alérgica a las picadas de esas pequeñas titanes. Una hormiguita acababa de picarme en la barriga... cómo llegó ahí? ni idea, pero ciertamente que regresé a mi realidad, esta vez agregando una picada por la que tendría que tomar antialérgico y forrarme con pomadas anestésicas. La chiquilla había picado con todas sus fuerzas, en cuestión de segundos ardía mi piel... parecía una actitud para exigir la atención que ella, la real, se merecía, y que yo estaba entregando a las que le multiplicaban en tamaño y que pretendía hacerle espacio en mi habitación.

Moraleja: no juzgues por las apariencias, que la chiquita es la que pica !! Y vayan a la Trienal que está buenísima :)

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