Que con esos gestos de complicidad me indiques que me pare del asiento, para llevarme a una esquina de tu biblioteca y decirme sin anestesia:
-"Mira, yo creo que tú eres una persona que sabe mucho, mucho, mucho...
*y yo pensando que venías con uno de esos típicos trucos u ocurrencias tuyas*
... y como yo quiero que tú sepas más que yo, o sea que a mi edad, tú sepas más que yo, quiero regalarte este libro".
Llegas entonces con tu regalo, y al ritmo que me lo entregas me cuentas que es un regalo de tu padre y que ahora es un regalo de ti para mí. Leo con mis ojos aguados la dedicatoria: "Para ver más que las estrellas. Para Elia (Alejandro Ascuasiati 01/01/2010)
*Para ver más que Marte y que la Luna de esa noche a través de su telescopio. Me quedo sin palabras ante su gesto sin precio, y ante su deseo de que pueda yo llegar a saber más que todo lo que atesora ese cerebro que hoy se desprende de un regalo paterno y ha sido siempre para mí tan misterioso, difícil y complejo de traducir... como el cerebro de un genio, de aquellos que en el fondo alojan los secretos de todo el universo, incluidas las estrellas. Ale, le deseo un feliz cumpleaños, feliz como esa noche de astronomía, cultura y salcocho en la cual no dudo que me convirtieses en la más feliz de todos los presentes*